¡Bienvenidos al corralito en España!

El Gobierno prohibirá pagar más de 2.500 euros en metálico a empresas y autónomos, lo que unido a la dificultad creciente para disponer de dinero en efectivo en los bancos (prueben a sacar de su cuenta 2.000€) que siguen quedándose con el dinero de los contribuyentes y de los clientes, hace que la situación financiera y empresarial se vaya tornando imposible.
¿Les suena la situación? ¿Sí? Pues no, no se trata de Argentina ni de Italia... ¡Bienvenidos al corralito español!
Las nuevas medidas intervencionistas del ¿gobierno? de Rajoy hacen que el corralito español, lleno eso sí de borregos, aparezca en escena en pleno esplendor, garantizando más dificultades y menos libertad.

Si el uso de las tarjetas ya es un gravamen en sí mismo que soporta el comercio y el usuario para mayor negocio de los bancos, esta medida es un robo tanto de derechos y de libertades como de dinero. Obligados en definitiva todos a no usar dinero en efectivo los beneficios de los bancos aumentarán, entorpeciendo el comercio y la iniciativa privada, y ahuyentando a los inversores que no quieren venir a un país en el que se recortan los derechos y las libertades, no se fomenta la competitividad, y en el que unos privilegiados bancos no abren líneas de crédito al tiempo que se quedan con el dinero de nuestros impuestos.

Pero, ¿Va a solucionar algo? ¿Va a ayudar a salir de la crisis?  

Evidentemente no. Nunca las medidas que recortan derechos y libertades, y en este caso el corralito, han solucionado nada. Y menos en economía. Cualquier solución en España pasa por la limitación y el recorte del estado, y por la libertad de los españoles. ¡Necesitamos una Constitución y unas leyes que protejan al ciudadano del poder del estado!. Mientras ésto no se haga seguiremos en la misma espiral crítica.
                                      
Les recomiendo que, de entrada y para protestar contra el corralito español, usen efectivo siempre que pueda ¡No paguen con tarjeta! ¡Huyan de los bancos! Apoyen al comercio y a los emprendedores usando el máximo efectivo posible. Es obvio que pagar en metálico los numerosos servicios que tenemos contratados es un fastidio, y que habrá de presionar a su empresa para percibir su salario en metálico, pero nunca se conquistaron derechos y libertades sentado en un sillón y sin sacrificios. ¡Reaccionen! ¡No compren a los bancos!
Una caja de puros o zapatos escondida y llena llena de oro les rentará más.